Lo tenía pendiente. Después de un primer intento fallido en el que la nieve y el hielo no me dejaron circular por la carretera de acceso, por fin lo he conseguido. Disfrutar de una jornada de senderismo en la Laguna Negra de Soria es perderse entre paisajes de alta montaña, pinares infinitos, riachuelos, cascadas, picos nevados y lagos de ensueño.
Situada en la Sierra de Picos de Urbión y a sólo 20 kilómetros de Vinuesa, la Laguna Negra se ha convertido en uno de los rincones más visitados de la provincia de Soria. Y no es de extrañar. Forma parte del Parque Natural de la Laguna Negra y los Circos Glaciares de Urbión en una de las sierras más elevadas del Sistema Ibérico. La singularidad de este parque es un paisaje esculpido durante miles de años por el hielo que nos ha dejado como resultado la belleza que podemos disfrutar en la actualidad.
Senderismo en la Laguna Negra: ascenso al Pico Urbión
Esta es, sin duda, una de las rutas más bonitas que se puede hacer desde la Laguna Negra. Pasearás al borde de la Laguna Negra y la Laguna Larga, cruzarás bosques de pino y cascadas para ascender hasta lo alto del Pico Urbión. Además de las increíbles vistas, como premio puedes hacer un pequeño desvío para alcanzar el nacimiento del emblemático río Duero. Caminata más completa imposible.
Datos prácticos
- Acceso: desde el parking de La Laguna Negra
- En temporada alta tendrás que dejar el coche a dos kilómetros del lago (hay autobuses para subir)
- El resto del año puedes acceder hasta el último parking a sólo 200 metros de la laguna
- Recorrido: lineal
- Dificultad: baja (la travesía se complica cuando hay nieve en el sendero)
- Longitud: 10 kilómetros
- Bien señalizada con carteles, balizas e hitos
- Tiempo estimado: 5 horas (con paradas para hacer fotos y comer)
- Desnivel: 500 metros de desnivel de subida y bajada
Empieza lo bueno. Lo primordial es elegir un buen día para la visita. Las nevadas dejan impracticable la carretera de acceso durante los temporales de invierno. Pero, durante el verano y festivos importantes, la afluencia masiva de turistas puede enturbiar lo que debería ser un día de paz y naturaleza. La primavera y el otoño suelen ser las mejores estaciones para planificar tu visita.
Ya está, elegido el día es el momento de poner rumbo a la Laguna Negra. Desde Burgos sólo tienes que llegar a Vinuesa y coger el desvío que está bien indicado. Hay un aparcamiento a unos dos kilómetros de la laguna y otro a sólo 200 metros. Durante la época estival y fechas de gran afluencia como Semana Santa no se permite el acceso al parking superior. Por ello se ofrece un servicio de autobús que salva estos dos kilómetros durante julio, agosto, fines de semana de septiembre y Semana Santa.
Ya hemos llegado a la Laguna Negra y ¡sorpresa! El sol brilla con fuerza y ese color negro del agua que creemos que nos vamos a encontrar se convierte en un profundo tono verdoso. La orilla está flanqueada por unas pasarelas de madera que no restan ni un ápice la belleza del entorno. Se trata de una laguna de origen glacial a 1753 metros de altitud rodeada por altas paredes de roca. Sólo por esta imagen merece la pena el viaje.
Al final de la zona de pasarelas podemos ver, si tenemos suerte, una preciosa cascada que cae desde lo alto de la montaña. Es justo ahí donde encontramos el desvío que indica el camino hacia el Pico Urbión. Debemos comenzar el ascenso por lo que será uno de los tramos más duros de la ruta. Es un sendero en constante subida entre rocas y el chorro de la cascada. A pesar del desnivel a mi no me pareció complicado en absoluto.
Una vez finalizado este tramo vas a disfrutar de una de las mejores vistas de la laguna desde arriba. Continuamos y, después de cruzar el río, la senda se abre en suave ascenso dejándonos ver a lo lejos los picos más altos. Es la parte más sencilla de la ruta. No tiene ninguna pérdida y después de varios kilómetros nos encontramos con otra laguna de origen glaciar, la Laguna Larga. No es tan bonita como la anterior pero sí un buen aliciente para seguir caminando.
Con el Pico Urbión en el horizonte, continuamos subiendo sin perder de vista los hitos que nos recuerdan que vamos en la dirección correcta. Ya queda muy poco y, a pesar de ser finales de mayo, debemos cruzar algunos neveros que no presentan ninguna dificultad. Con mayor cantidad de nieve, lo que ha sido un camino sencillo, se puede convertir en una trampa mortal. ¡Mucho cuidado! No hay que arriesgar innecesariamente.
Con la vista puesta en la pequeña cruz que corona la cima hacemos el último esfuerzo. Las vistas desde esta zona son insuperables: la inmensidad de los bosques de pinos y, justo antes de hacer cima, la visión de la laguna de Urbión es una maravilla. Coronar esta montaña de 2228 metros de altura ha sido fácil y nos ha regalado un montón de imágenes inolvidables.
El camino de regreso lo haremos por el mismo sendero. Eso sí, tomamos un pequeño desvío señalizado que nos dirige hacia el nacimiento del río Duero. La nieve que aún persiste en el lugar no nos deja contemplar bien la surgencia del agua pero, desde luego, era un sitio al que tenía que ir.
Se nos hizo un poco tarde para más desvíos pero, si estás motivado, puedes acceder hasta otra laguna por un camino bien señalizado. Se trata de la Laguna Helada en cuya búsqueda podemos hacer la ruta circular, en vez de lineal.
Hasta aquí ha llegado la jornada de senderismo en La Laguna Negra. Es uno de los trekkings más populares de la provincia de Soria por lo que te recomiendo que intentes evitar días de gran afluencia turística.
Dónde alojarse en la Laguna Negra
La opción más cercana es buscar alojamiento en Vinuesa. En esta pequeña localidad vais a encontrar buenos alojamientos, restaurantes y los servicios necesarios para disfrutar de un fin de semana ideal en la zona. Es un bonito pueblo para pasear y tomarse un merecido descanso después de un día de senderismo en la Laguna Negra.
Mi elección fue el Hostal Revinuesa. Bueno, bonito y barato. Poco más se le puede pedir a un alojamiento rural por 45 euros una noche en habitación doble para dos personas y con desayuno incluido. De estilo rústico, este hostal se sitúa en la carretera principal del pueblo.
Qué hacer en los alrededores de la Laguna Negra
Estamos en el norte de Soria dentro de la Comarca de Pinares y muy cerquita de las provincias de Burgos y Logroño. Hay un montón de posibilidades a combinar con una jornada de senderismo en la Laguna Negra.
Si realizas la escapada en pleno invierno, muy cerca de la Laguna Negra encontrarás una estación de esquí llamada Punto de Nieve. Es realmente pequeña. Sólo tiene una pista pero también hay una zona especial para tirarse con trineos. Yo me lo pasé pipa.
También muy cerquita de Vinuesa y de la Laguna Negra hay una lugar realmente especial que merece la pena visitar. Estoy hablando de la Fuentona de Muriel. Se trata del nacimiento del río Abión que surge formando una preciosa y cristalina laguna.
Para locos por el sol y la playa tenemos una de interior a sólo 10 kilómetros de Vinuesa en el embalse de la Cuerda del Pozo. El embalse cuenta con la Playa de Pita que además tiene una gran zona recreativa en la que podrás hasta montar en un hidropedal.
Ya un poquito más lejos, a unos 50 kilómetros de Vinuesa y en la provincia de La Rioja, se encuentra el Parque Natural Sierra de Cebollera. Con cumbres de más de 2000 metros este espacio nos ofrece bellos paisajes, extensos bosques de pino haya y roble, y preciosas cascadas para disfrutar durante todo el año.
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