Seguro de viaje recomendado, opiniones y mi experiencia personal

Seguro que en el pasado ni te lo habías planteado. Nunca nos acordamos de lo importante que es viajar asegurado hasta que nos vemos envueltos en alguna situación desagradable y es entonces cuando ya no hay vuelta atrás. Toca apechugar y aprender de los errores. Esa es básicamente mi historia. Desde ese momento es una de las primeras cosas que contrato a la hora de organizar cualquier escapada. Hoy os voy a hablar de mi seguro de viaje recomendado que cubre todos los supuestos de Covid-19, de opiniones basadas en mi experiencia personal, de coberturas y de situaciones reales que me han sucedido en el extranjero.

He de decir de antemano que soy una persona bastante gafe y me suelen ocurrir todo tipo de situaciones cuando viajo. He tenido que echar mano del seguro unas cuantas veces. Sin embargo, aunque os voy a contar un par de problemas reales, nunca me ha pasado nada realmente grave de vida o muerte. Y esperemos que siga así.

¿Cuándo me di cuenta que nunca debía salir de casa sin seguro de viaje?

Ese momento no se produjo en la otra punta del mundo precisamente. Sucedió en Rumanía, un país perteneciente a la Unión Europea cuya cobertura médica queda cubierta por nuestra Tarjeta Sanitaria Europea. Fenomenal, no me hace falta seguro de viaje pensé.

La odisea se produjo el penúltimo día de viaje (afortunadamente). Estaba en Bucarest en el mes de agosto y sufriendo una tremenda ola de calor. Por la tarde los mosquitos se cebaron conmigo. Decenas de picaduras en cara, brazos y piernas. Nada que no me suceda habitualmente. Pero, esta vez, las picadas estaban reaccionando peor que nunca. Comenzaron a hincharse muchísimo y a generar ampollas.

Sin embargo, lo peor sucedió al día siguiente. El momento en el que me asusté de verdad. Lejos de mejorar, cuando me levanté de la cama y me miré al espejo casi me caigo del susto. Tenía el ojo izquierdo tan hinchado que no podía abrirlo. Y las picadas de brazos y piernas me habían deformado las extremidades y habían generado ampollas de varios centímetros de diámetro. Algunas habían reventado, no paraban de supurar y se estaban infectando.

Me planté apresurada en el mejor hospital de la ciudad, el Hospital Universitario de Bucarest. Llevaba mi resguardo de la tarjeta sanitaria europea (cuando no tienes trabajo fijo no te dan la tarjeta física, sólo un resguardo en papel). Allí nadie hablaba inglés y no pusieron mucho empeño por intentar entenderme. Pasaba el tiempo (horas) y seguían sin hacerme caso. Ni siquiera me trasladaron a la sala de espera. Me tuvieron de pie esperando junto a la recepción. Estaba claro que ni me entendían ni me querían entender.

Decidí largarme y acudir a la farmacia más cercana. Aún recuerdo la cara horrorizada de la farmacéutica cuando me vio entrar. ¡Alucinó!. Lo único que pudo hacer por mí fue desinfectarme las heridas y darme algunas recomendaciones. Esa misma tarde tenía que coger el avión de vuelta a España y me daba miedo que en esas condiciones no me dejasen volar.

Al final me dejaron volar y nadie me hizo preguntas. Os juro que si me hubieseis visto en ese momento habríais pensado que tenía una enfermedad contagiosa súper chunga. Afortunadamente, nadie lo vio así en los controles. Aterricé en Barcelona y me dirigí al primer hospital que encontré. Allí me aliviaron los síntomas pero no supieron ver qué era lo que realmente me pasaba. Meses más tarde fui diagnosticada de una enfermedad parasitaria que había contraído el año anterior en Camerún. Tenía larvas (gusanos) creciendo y moviéndose debajo de la piel y me habían dejado el sistema inmunitario hecho polvo. De ahí las reacciones tan desproporcionadas a las picaduras. Para no dormir ¿verdad?.

Este es sólo un ejemplo. Aún con tarjeta sanitaria europea tuve problemas al acudir a un hospital. No quiero ni pensar que en vez de sucederme el penúltimo día de viaje hubiese sido al comienzo. Lo habría pasado realmente mal sin poder acudir a un seguro médico que me gestionase todos los trámites.

Más tarde, descubrí que el propio consulado español recomienda viajar con seguro médico privado en ciertos países europeos como Rumanía o Bulgaria. Países que entran dentro de las coberturas de la tarjeta sanitaria europea. Está claro que esta tarjetita es de gran ayuda, pero no una garantía absoluta. Digamos que tiene letra pequeña que en muchos casos desconocemos. Pero esto da para mucho y lo podéis consultar en el artículo: Cobertura de la Tarjeta Sanitaria Europea y falsos mitos.

¿Qué coberturas debemos tener en cuenta a la hora de contratar un seguro de viajes a cualquier parte del mundo?

No todas las pólizas son adecuadas para todos los viajeros. Debemos tener en cuenta nuestras circunstancias, la situación actual del coronavirus, el destino elegido y el tipo de actividades que vamos a hacer. Recomiendo que te fijes mucho y leas la letra pequeña de todo, en especial de los puntos que voy a resaltar.

• Covid-19. Sí, es normal que encabece la lista. Debes fijarte si el seguro te cubre todos los gastos médicos y repatriación ante un contagio de coronavirus, o las pruebas diagnósticas ante sintomatología o contacto directo con positivo. También importante saber si en caso de cuarentena o convalecencia en hotel se hace cargo de los gastos de prolongación de estancia. Y, si contratas un seguro de anulación, que te cubra ante un positivo tuyo, del acompañante y familiares en primer grado o ante una posible cuarentena por contacto directo.
• Cantidades de cobertura médica. Por ejemplo, no es lo mismo viajar a Marruecos que viajar a Estados Unidos. Debemos tener en cuenta los costes sanitarios que hay en cada país. Cualquier problemilla en países como Japón o Estados Unidos puede salirte por un gran pico. Por ello, en estos países debemos contratar las coberturas sanitarias más altas, nunca menores a 100.000 euros.
• Cancelación de viaje. Esta cobertura suele contratarse como extra dentro de las pólizas y, aunque no se le da mucha importancia, nos puede ahorrar mucho dinero en caso de una cancelación imprevista. Sólo por las coberturas ante contagio de coronavirus o cuarentena ya merece la pena.
• Interrupción y regreso anticipado. En la misma línea que la anterior, debemos asegurarnos que el seguro nos cubra ante un imprevisto que nos haga regresar anticipadamente y que se encargue de los gastos del viaje.
• Problemas con el equipaje. Algo bastante común y que nos puede chafar un viaje. Revisa las cantidades por demora en la entrega o por pérdida de equipaje.
• Retrasos y pérdidas de conexiones. Otro de los problemas más comunes cuando viajamos. Nos pueden retrasar un vuelo durante horas o incluso días, quedarnos colgados en el aeropuerto o perder una conexión. ¿Quién se hace cargo de los gastos de dietas y alojamientos? Revisa bien las condiciones de las pólizas.
• Actividades de aventura. Y con esto no me refiero sólo a deportes de alto riesgo como el esquí, buceo o barranquismo. Debes contratar esta cobertura por ejemplo si sueles realizar senderismo y tener en cuenta la altitud del destino. Aunque en este último caso, si eres muy aficionado a los trekkings, también te recomiendo echar un ojo a los seguros de la Federación de Montaña. No es un seguro de viaje en sí, es un producto complementario que sólo te cubre ante este tipo de actividades específicas en montaña. Pero están especializados en rescates y pueden sacarte de un apuro gordísimo.

Seguro de viaje recomendado y opiniones basadas en mi experiencia personal

Os voy a ser completamente sincera desde el principio. En la actualidad, existen muchísimas compañías que ofrecen seguros de viaje con buenas coberturas y a precios bastante competitivos. Es cuestión de hacer un simple búsqueda en google para comparar. Pero he decidido hablar sólo de lo que conozco en primera persona. Por muchas coberturas que tengan las pólizas, al final lo más importante es cómo se resuelven los problemas reales y la atención al cliente de cada compañía.

Desde que comprendí que debía viajar con un buen seguro de viaje hace ya más de 5 años, lo he contratado siempre con la compañía Iati Seguros. Se trata de una empresa española que suele colaborar con blogueros de viajes como yo. Nos ofrecen tanto a nosotros como a nuestros lectores descuentos en las pólizas, y, además, nos llevamos pequeñas comisiones por las ventas que se generan a través de los blogs. Así que, con estas condiciones, decidí empezar a viajar con ellos. Pensé: «Si no me dan un buen servicio, seguiré probando con otras empresas hasta que encuentre la mía». Y así hasta hoy. Nunca tuve que buscar otra.

Cuando he tenido que recurrir a ellos siempre han respondido rápido y bien. Han mejorado y ampliado muchísimo las coberturas que ofrecen en los últimos años y, además, son uno de los más económicos que hay en el mercado. Para mí, de momento, todo ventajas. Eso sí, si algún día las circunstancias cambian, no dudaré en recurrir a otras compañías y contarlo todo en el blog. Y como siempre digo, puedes aprovecharte de un suculento descuento directo del 5% por contratarlo desde Viajeros 3.0. El descuento se aplica directamente al pinchar el link y puedes utilizarlo tantas veces como quieras.

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Esta es mi opinión personal. ¿Hay otras compañías que ofrezcan buenos servicios y coberturas? Por supuesto. Pero, si estás contento con algo, ¿por qué cambiar?. Ese es el motivo por el que sigo fiel a Iati Seguros desde el principio. Y también es la razón por la que no he querido hacer comparativas de empresas que, aunque se que también tienen buenas coberturas, no conozco de primera mano.

Pólizas de Iati Seguros ¿cuál es la que me conviene?

Si alguna vez has viajado con Iati Seguros o has entrado en su web, habrás visto que ofrecen distintos tipos de pólizas según las necesidades de cada viaje o de cada viajero. Vamos a desgranarlas y especificar cuáles son las ventajas y desventajas de cada una de ellas.

Pero antes de entrar en materia quería resaltar que los seguros de Iati no tienen franquicia. Y lo digo porque últimamente me han preguntado sobre este tema y he visto algunas pólizas con franquicias realmente altas. Sólo es una de las razones por las que es mi seguro de viaje recomendado.

Estas características son extrapolables a cualquier compañía. Todas cuentan con diversos tipos de pólizas y cada una es ideal para distintos tipos de viajes y viajeros.

¿Cuándo he tenido que recurrir a mi seguro de viaje y cómo ha respondido? Opiniones y experiencia personal

Cómo os comentaba al principio, nunca me ha sucedido algo realmente grave. Éstas son las dos ocasiones en las que tuve que recurrir a mi póliza de Iati Seguros.

👍Problema médico en Argentina (2019). Recién iniciado el viaje sufrí una mala caida en San Carlos de Bariloche. Llamé al seguro y en menos de una hora me estaban curando las heridas de ambas rodillas en un centro de salud de la ciudad y haciéndome radiografías para descartar problemas mayores. No tuve que adelantar ni un euro y a mi regreso me devolvieron el coste de las llamadas telefónicas internacionales. Todo súper cómodo.

👍Cobertura de gastos por pérdida de conexión aérea en Italia (2018). Durante el regreso de mi viaje a Albania perdí una conexión aérea por el retraso del primer vuelo. La agencia con la que contraté los vuelos se encargó de los costes del nuevo avión e Iati Seguros pagó los gastos de hotel y comidas (tuve que hacer noche junto al aeropuerto de Bérgamo).

👍Problema médico en Croacia (2014). Tuve una reacción alérgica en la piel por una crema solar en mal estado. En este caso no llamé al teléfono de urgencias. Acudí al centro médico más cercano y, cuando regresé a España, me devolvieron todos los gastos médicos presentando recibos y facturas. Si les hubiese llamado previamente no habría tenido que adelantar dinero. Ellos se encargan.

Por el momento, nunca he tenido que llamarles por algo realmente urgente ni grave. Pero os puedo decir que una buena amiga mía tuvo que ser hospitalizada por una gastroenteritis aguda en Cuba y la atendieron fenomenal en todo momento. Le fue a buscar una ambulancia al hotel y estuvo ingresada unas horas hasta que mejoró. Al igual que me sucedió  a mi en Argentina, no tuvo que adelantar dinero de costes médicos y hospitalarios, y el precio de la llamada telefónica internacional se la devolvieron a su regreso (las llamadas desde Cuba tienen un precio altísimo).

👎También me ha llegado alguna opinión negativa de gente cercana sobre este seguro, pero considero que se trata de una cuestión de desconocimiento. Hay que leerse bien la letra pequeña y saber qué coberturas tenemos y cuáles no. Por ejemplo, los hurtos sin intimidación no entran dentro de las coberturas. Y es un error bastante común pensar que sí. Como también los es no leerse las posibles causas de cancelación y luego llevarnos sustos. Ante la duda lo mejor es que consultes su sección de preguntas frecuentes.

Por ponerle alguna pega, lo que más echo de menos en este seguro es que no haya un número de WhatsApp para hacer consultas rápidas. Pero al final son problemas menores.

Elijas la compañía que elijas lo importante es que te sientas cómodo y seguro con ella. Y por supuesto ¡nunca salgas sin tu seguro de viaje! Se abre la veda para los comentarios. ¿Cuáles han sido vuestras peores experiencias de viaje? ¿viajáis siempre con seguro? ¿alguna recomendación?.

Código ético. Recibo una pequeña comisión por cada seguro vendido desde el link de descuento. Son cantidades que me ayudan a mantener el blog y, a cambio, vosotros también recibís un descuento directo sobre la tarifa oficial.  Las opiniones expresadas en este artículo son honestas y están basadas en mi experiencia personal.